Balayage
La variedad de los colores del Perú en un hilado suave.
Balayage surgió de la idea de crear un hilado de alta calidad siguiendo un concepto de colores especial. Queríamos crear colores que parecieran ser teñidos a mando, que fluyesen entre sí y cuyas posibles combinaciones fuesen ilimitadas y armoniosas. El resultado fue un hilado que es ideal para chales, pero por supuesto también para cualquier otro proyecto de tejido. Es particularmente adecuado para técnicas de color como jacquard o fair isle. Fue un proyecto que desarrollamos en colaboración con la famosa diseñadora y nuestra buena amiga, Melanie Berg, también conocida como Mairlynd. Balayage es la fusión de su instinto innato para desarrollar colores y mezclar unos con otros y nuestra experiencia en la producción de hilados exclusivos y de alta calidad.
Para implementar esta idea, primero tomamos tres hilados diferentes que variaban en su composición y grosor. Debido a la diferente composición en la calidad de la fibra y los diferentes matices de color, logramos crear un moteado natural que da un color suave y multifacético. Examinamos meticulosamente cada unos de los hilados para ver cuál de las muestras podía lograr mejor el efecto de color deseado. Porque incluso las diferencias más sutiles en la composición de la fibra tienen un efecto considerable en el color que se obtiene al final. En esta etapa de desarrollo además del color, nos concentramos también en las propiedades hápticas y la calidad intrínseca del hilo. El hilo debería ser especialmente apropiado para tejer chales en una variedad de colores sin ser demasiado voluminoso, pero tampoco demasiado liso. Así, examinamos diferentes colores en diferentes combinaciones. Para nosotros era importante obtener colores especiales, que no fueran demasiado llamativos y que se pudieran combinar con colores de contraste de manera armoniosa.
El hilado en sí
¿Por qué la llamamos Balayage? El término tiene su origen en la industria de la peluquería y describe una técnica francesa de coloración del cabello en la que se le tiñe con un movimiento similar a barrer (del francés “Balayage”). Esto hace posible la creación de mezclas de color de varias intensidades. Los colores del Balayage encarnan este principio del degradado de color. Creamos 4 grupos de colores que se pueden combinar entre sí o con los colores de los otros grupos para crear un contraste. Los colores recuerdan la variedad de colores del Perú y llevan el nombre de lugares peruanos.
La especialidad del hilo, la mezcla de las fibras de lana merino orgánica blanca con lana de baby alpaca blanca y gris, crea un tono gris moteado que se ha usado como color base para el teñido (color 617 Ishinca). Así se producen efectos de color muy naturales y similares a los efectos logrados con el teñido a mano.
Balayage está compuesto por un 80% de baby alpaca suave y un 20% de lana virgen, merino orgánico extrafino de 21,5 micras, por supuesto libre de “mulesing”. Con una longitud de 175 m, el ovillo pesa 50 g. Con agujas de 3,25 mm se obtiene un tejido perfecto.
Un hilado producido de manera justa y sostenible
El concepto de sostenibilidad se extiende desde la fibra animal hasta el material de embalaje.
La fibra en sí tiene su origen en Perú y el hilado también se produce allá. En los altiplanos del Perú, las alpacas andan libremente y se mantienen de una manera apropiada para su especie. La esquila de los animales se realiza con máquinas modernas para que los animales no sufran. Pero la sostenibilidad no solo incluye el bienestar animal. Las condiciones laborales son justas y se concede gran importancia a una economía autosuficiente que beneficie al medio ambiente. Así, el lodo que resulta al lavar las fibras se utiliza para fertilizar los campos. Mediante el uso de energía solar, se presta atención a un consumo energético respetuoso con el medio ambiente y el agua utilizada se recicla.